La selección boliviana se dio un bálsamo de alegría tras derrotar a Venezuela este jueves en el estadio Hernando Siles de La Paz por 4-2 con una buena actuación de Rodrigo Ramallo y Rudy Cardozo para que el equipo de Julio César Baldivieso consiga sus primeros tres puntos en las eliminatorias y mantener la ilusión para seguir con chances de ir al Mundial de Rusia-2018.
Bolivia tuvo un primer tiempo muy bueno frente a un rival sin peso. Tuvo llegadas claras de gol con los desbordes de Erwin Saavedra, por derecha, y Leonel Morales, por izquierda. A ellos se sumó Juan Carlos Arce y Damián Lizio, que tuvieron en sus pies las primeras chances de gol en el partido. Venezuela, que no mostró ni la sombra de sus últimas presentaciones en la altura, sufrió las ausencias de sus principales figuras y terminó pagando caro su conformismo en la cancha.
La Vinotinto acomodaba su muro defensivo, pero el chapaco Cardozo metió un pase filtrado para romper el esquena visitante y hacer estallar el escenario miraflorino con el golazo de Ramallo. Rodrigo recibió la pelota encaró y ‘pinchó’ la pelota ante la salida del golero Alaín Baroja para el primero (18’). Con el envión anímico por la apertura del marcador, Lizio ingresó al área y fue derribado por el zaguero visitante tres minutos después del primer gol.
La Verde sacó el pie del acelerador y el rival aprovechó las facilidades que otorgaron Edward Zenteno y Fernando Marteli en el fondo. De un lateral nació el descuento. Rincón sacó un zurdazo que se desvió y el balón le quedó a Mario Rondón, que no dudó en fusilar a Daniel Vaca para el 2-1 en la media hora de juego. Los dirigidos por Noel Sanvicente atravesaban su mejor momento del partido y con poco les bastó para complicar a la defensa, que sigue siendo el punto más débil en el planteamiento de Baldivieso.
En el 45’ la selección asestó otro golpe sicológico. Cardozo inició la jugada, Chumacero centró de forma precisa y Ramallo apareció con una ‘palomita’ para conectar el balón de cabeza y poner el 3-1 para irse a los vestidores con una ventaja importante de cara al segundo tiempo. Los pupilos de ‘Baldi’ se marchaban con un triunfo parcial y una lluvia de aplausos de los pocos espectadores que llegaron hasta las tribunas del Hernando Siles.
Un segundo tiempo menos intenso
La segunda mitad fue más calmada, pero eso no quiere decir que no hubo emociones. Cardozo aprovechó un balón suelto en el área rival y sacó un zurdazo para el cuarto a los 48’. Seis minutos después Richard Blanco dejó sentado a Zenteno con un regate para de zurda clavar la pelota en las redes ante la estirada de Vaca. Era el 4-2, que terminó siendo el definitivo para que los hinchas bolivianos festejen ante un rival al que no se le ganaba desde hace 10 años.
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