Casi la totalidad de los clubes de la Liga Profesional del Fútbol Boliviano pasan una de sus peores crisis económicas y corren el riesgo de no concluir el torneo Apertura, situación que deja preocupados a los ejecutivos de Futbolistas Agremiados de Bolivia (FABOL).
“Es un problema que pasan la mayoría de los clubes y los más complicado es que la dirigencia de la Liga o los clubes no proponen un plan o propuesta para solucionar este conflicto”, declaró Luis Caballero, miembro de FABOL.
Los clubes Blooming, San José y Real Potosí están cerca de perder sus Bienes patrimoniales por deudas a Servicio de Impuestos Nacionales (SIN).
El torneo Apertura fue un termómetro que permitió conocer la capacidad económica de los clubes y el 92 por ciento no está con posibilidad de mantener sus egresos que generalmente superan la capacidad de ingresos.
Caballero aseguró que en pasados días los jugadores de Blooming realizaron una demanda conjunta ante el Tribunal de Resolución de Disputas (TRD) porque no cobraron salarios por tres meses.
“Si una institución no paga a un empleado, es un despido indirecto, pero en justicia ordinaria. Nosotros como FABOL estamos obligados a apoyar la decisión del o los jugadores apelando a las normativas deportivas y la Ley del Deporte”, dijo Caballero.
En Wilstermann la situación no es ajena a la realidad de otros clubes y FABOL está obligada a brindar asesoramiento al jugador que lo solicite.
Los futbolistas aviadores informaron que no cobran salarios hace tres meses, además de primas. “Los dirigentes se comprometieron a pagar septiembre hasta el pasado sábado, pero no lo hicieron y eso nos preocupa”, dijo Enrique Díaz defensor del rojo. Situación que también perjudica según el entrenador Juan Manuel Llop, porque no tiene a “plenitud a sus jugadores”.
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