viernes, 4 de septiembre de 2015

Antonio López: ‘Mientras más problemas hay, llegas más débil’



Los problemas generan limitaciones, distraen y evitan atender las cosas esenciales, según el entrenador español Antonio López Habas, quien fue asistente de campo del seleccionado boliviano entre 1993 y 1994, en el Mundial de Estados Unidos, y seleccionador subcampeón de la Copa América 1997 jugada en Bolivia.

— ¿Qué sabe del fútbol boliviano y de la Selección?

— No mucho, la verdad, porque ahora estoy entre España y la India y no es muy fácil seguir las noticias, pero pese a eso siempre trato de informarme por el cariño enorme que le tengo a Bolivia. Allí pasé cosas maravillosas. Sé que los acontecimientos no fueron muy buenos porque hubo algún problema con Mauricio Soria y que hace poco fue nominado Julio Baldivieso, a quien conozco bastante, y a quien le deseo mucho éxito. Ojalá que se puedan revertir las cosas y que Bolivia consiga lo que nosotros conseguimos hace años.

— ¿Cuánto pueden influir los problemas en un seleccionado que está a punto de debutar?

— Es evidente que mientras más problemas hay, llegarás más débil a una competencia porque tienes desventajas ante los otros países. Ahora, es al revés cuando tienes más medios, mejores equipos, canteras o infraestructura, tus posibilidades serán mucho mejores, pues la Selección absoluta se nutre de todo eso. Allá (en Bolivia) como que algunas cosas se hacen más sufridas y debe trabajarse con eso incluido. Algo de eso lo tuvimos y vivimos cuando nos tocó estar con Xabier (Azkargorta).

— ¿Con ese panorama cómo cree que será el comienzo de Bolivia en la Eliminatoria?

— Por experiencia propia puedo decir que mientras más problemas tuvimos, supimos en base a mucho amor propio sacar adelante las cosas, porque también puede ser que teniendo todas las cosas tampoco sea la panacea. Ahora se suma Brasil, muchos dicen que es un cupo menos, pero hay que pelear duro.

— ¿Qué sabe de Julio César Baldivieso entrenador?

— Hace tiempo, pero mucho tiempo que no hablo con Julio y la verdad es que tampoco sé mucho de cómo será su perfil y desarrollo como entrenador. Como jugador fue muy importante en la historia de Bolivia, tiene una gran trayectoria, pero como entrenador lo primero es que hay que darle un margen de confianza, el que todos lo necesitamos para que se consigan las cosas y creo que lo primero que hay que hacer es apoyarlo antes de ver cualquier otra cosa. Julio tiene la oportunidad de su vida, que la agarre como él siempre enfrentó las cosas, con su convicción y deseos de que pueden salir bien e ir adelante.

— ¿Qué recuerda de su experiencia como seleccionador de Bolivia?

— Fue espectacular. Primero con Xabier y luego solo, pienso que me tocó vivir la época más maravillosa y gloriosa de la Selección boliviana. Clasificamos a un Mundial, fuimos a la Copa América de Uruguay y peleamos, en casa jugamos la final con Brasil. Pienso que estuve en la época más brillante.

— ¿No había problemas?

— Sí, pero esos problemas no se los llevamos a los jugadores. Nosotros forjamos un grupo armónico, sólido, con compromiso. Yo pienso que la Selección boliviana no vive de sus figuras, sino del compromiso colectivo de todos.
Julio tiene la ocasión de su vida y debe agarrarla con todo’

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