Bolivia se puso en ventaja gracias a Marcelo Martins Moreno, el solitario delantero que marcó de penal a los 27’ como premio al tesón de siempre. El ‘Matador’ acomodó y remató bien luego de que Saucedo estrellara un derechazo en la mano del defensor Zambrano. El árbitro, pese a toda la ceremonia del VAR (se perdieron seis minutos), marcó el tiro desde los 12 pasos y el incansable 9 remató a la derecha de Gallese (1-0).
Hasta ahí, Bolivia recibía su premio gracias a su comienzo distinto con relación a su anterior partido. Le cortó los enlaces a Perú estando atento vía Leonel Justiniano y Raúl Castro, y apoyó en ataque sobre todo a través de Fernando Saucedo. El nacional fue el único de los volantes que siempre miró hacia el frente, que no le quemó el balón como al resto, que solo atinó a pasar el balón hacia atrás.
Pero la ventaja nos duró poco, porque a los 44’ un grueso error en salida de Saavedra posibilitó que Cueva le enviara un balón perfecto a Paolo Guerrero y el artillero, implacable como casi siempre, no perdonó para marcar el 1-1 parcial. Tarde fue el cruce de Adrián Jusino porque el remate del goleador terminó en las redes. Con ese resultado se fueron al descanso aunque en el complemento todo varió para la selección.
Perú salió mejor, Farfán fue más protagonista apoyando bastante a Guerrero. La ‘Foquita’ puso el 2-1 a los 54’ luego de un cabezazo en el área chica, justamente tras un centro del atacante incaico. En el salto le ganó a Marvin Bejarano y marcó pese a la estirada de Carlos Lampe. Ese gol tiró abajo cualquier intención de Bolivia porque el equipo quedó noqueado y no pudo levantarse.
Sin producción en ofensiva vino la primera mala decisión del técnico Villegas: sacó a Fernando Saucedo (inexplicable) y metió a Roberto Carlos Fernández, que mereció comenzar el partido pero que ingresó por alguien que jugaba bien. Poco después se la jugó por Leo Vaca (en lugar de un Saavedra impreciso) para cerrar los cambios con Gílbert Álvarez por Castro. Pero Bolivia ya no tenía quién genere en el medio.
Sin Saucedo en cancha, el equipo sufrió porque Alejandro Chumacero, que se quedó en esa función, fue improductivo. ‘Chuma’ estuvo totalmente desconocido, nervioso cuando el balón le llegó a los pies, ya que el primer giro que hacía con la cabeza era mirar hacia atrás, a ver a quién entregarle el fierro caliente que tenía en ese momento. La experiencia del jugador no apareció y más bien se diluyó cuando no debió hacerlo. Ahí, Villegas igual se equivocó.
Es cierto, pudo igualar parcialmente en una jugada que Saavedra echó por la borda (67’), pero ahí se diluyó todo. Hubo bronca boliviana en la tribuna porque cuando el partido moría, Edison Flores puso el 3-1 final en una jugada que inició Farfán y que el 20 peruano liquidó sin problemas ante la salida desesperada de Carlos Emilio Lampe. Con este resultado acabó el partido, con una Bolivia que terminó lastimada por una selección de Perú que fue de menos a más.
¿Qué le queda a Bolivia? Simplemente esperar un milagro, deberá ganarle a Venezuela el sábado en el Mineirao de Belo Horizonte para intentar clasificarse como uno de los dos mejores terceros. Aunque, claro, también dependerá de lo que pase en los otros grupos. De todas formas, el plantel ya comenzó a alistar sus maletas tras otra frustración copera. Villegas se justificó de que se trata de un proceso y que es necesario tener tiempo para corregir los errores.
La selección es en estos momentos la peor de su grupo y encima su próximo rival ya demostró que tiene calidad y que no va a ser nada fácil ganarle.
Cuando Saucedo manejaba el medio campo, el DT lo sacó
El volante cruceño Fernando Saucedo era el que mejor destino le daba al balón en el medio terreno, pero Eduardo Villegas decidió sustituirlo por Roberto Carlos Fernández. La variante hizo que la selección de Perú copara aún más el centro de la cancha, mientras la Verde perdía a un generador de juego.
El partido estaba 2-1 y Bolivia salía con chispazos en busca del empate, pero el cambio hecho por el DT a los 71 minutos ‘mató’ las aspiraciones, porque Saucedo, corría, metía y levantaba la cabeza en busca del mejor compañero ubicado. Todo lo contrario, sucedía con Alejandro Chumacero, el otro volante, que pese a ser derecho estaba recostado por la izquierda. Su juego no era gravitante y se equivocó en más de una oportunidad en la entrega.
Por lo visto en el terreno de juego, Villegas se equivocó en la lectura del partido. Si bien hizo debutar a Fernández, con apenas 19 años, el objetivo era otro ante una selección incaica, que sin lucir sus mejores galas vapuleó a la Verde cuando apretó el acelerador.
De no ser por el guardameta Carlos Emilio Lampe, la cuenta pudo ser más amplia, ya que el buen arquero nacional salvó la caída en más de una oportunidad, como ya nos tiene acostumbrados. Es una lástima que esto pase porque el equipo boliviano quedó noqueado y con la mirada en la puerta de salida, junto a otras tres selecciones que quedarán fuera en la primera fase; aún con este panorama el representativo boliviano tiene remotas chances en el último juego ante Venezuela el 22 de junio (15:00 hb) en Belo Horizonte.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario