El golazo de Jesús Vargas a los 20 minutos de partido fue suficiente para que la Vinotinto venciera, alcanzara los 9 puntos en la tabla como líder de su grupo y se asegurara un boleto entre los seis mejores.
Bolivia por su parte, quedó prácticamente eliminada, aunque una combinación de victoria frente a Brasil en la última fecha y la derrota de Colombia contra Chile ese mismo día, dejaría a los verdes igualados a puntos con cafeteros y chilenos y sería la diferencia de goles la que determinaría el pase.
Venezuela salió concienciado a por su clasificación antes de descansar por la última jornada y arrancó el partido volcado hacia la portería boliviana, hasta que el minuto 20, por obra de Vargas, se puso por delante en el marcador.
A raíz de un saque lateral y después de dos rebotes, Vargas tomó el balón en la esquina derecha del área y con un soberbio zurdazo puso el balón en la escuadra opuesta de la portería de la Verde haciendo inútil la estirada de Jairo Cuéllar.
Bolivia dio en ese momento un paso al frente en el partido consciente de que necesitaba de goles para no quedar prácticamente eliminado del torneo y movió sus líneas al ataque ante la acuciante necesidad.
Tras la vuelta de los vestuarios la situación se puso más de cara para Bolivia después la expulsión del venezolano Jan Carlos Hurtado a los cinco minutos de la reanudación.
Desde ese momento, la selección andina se lanzó a todo o nada contra el área venezolana, pero cada intento acababa chocando contra la muralla defensiva que planteó el técnico de la Vinotinto, Rafael Dudamel, más todavía después de los cambios defensivos para reforzar el centro del campo.
Al final Bolivia no pudo lograr el empate.
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